Muchas personas, aun en la actualidad, en países cercanos al ecuador mueren de enfermedades provenientes de los mosquitos, enfermedades como Malaria, dengue, virus del Nilo del oeste y Chikunguña. Los insecticidas son esenciales para la supervivencia en estas regiones. Fumakilla comenzó a liderar el desarrollo de insecticidas en el mundo, con el objetivo de mejorar la situación de vida en Japón, donde esas pestes también son abundantes.
Fumakilla ha usado tecnologías únicas para mejorar la seguridad y la efectividad de los productos insecticidas. Hoy en día VAPE es reconocida en 70 países por ser una marca confiable. En tiempos recientes con el surgimiento de nuevos virus y bacterias que causan daños a las personas, Fumakilla, como fabricante de productos para el mantenimiento del hogar, realiza investigaciones día tras día para proteger la vida y la salud de este y otros peligros de la vida diaria.

Nuestro modo de vida cambió drásticamente con el progreso de la civilización, dando lugar a problemas como la rápida propagación del moho y las garrapatas, la profusión de la rinitis alérgica y el aumento de los incidentes por intoxicación alimentaria. Desarrollamos una serie de productos con conceptos innovadores, como los productos desinfectantes para el hogar hechos de ingredientes totalmente naturales y una crema para la rinitis alérgica que elimina la necesidad de llevar mascarilla para protegerse del polen. Fumakilla no solo tiene como objetivo resolver problemas, sino también mejorar la calidad de vida mediante la fabricación fundamentada en la artesanía.

Los problemas con el medio ambiente cada vez son más graves. Con el fin de llevar la alegría de vivir con plantas al mayor número de personas posible, Fumakilla introdujo su línea de productos de jardinería Kadan en 1968. Fuimos un paso adelante de nuestra competencia al percibir una preocupación creciente por parte de nuestros clientes por el medio ambiente y la tendencia hacía los productos totalmente naturales. Por consiguiente, promovimos el desarrollo de productos sin componentes químicos artificiales, incluidos los insecticidas organofosforados y los agentes tensioactivos, cuyos efectos nocivos para el medio ambiente se señalaron. De esta manera, fuimos aumentado la satisfacción de los consumidores al tiempo que reducíamos el impacto medioambiental.